En cuartos de final el rival otro escocés, el Hibernian FC, y la ida terminó con goleada 5-0 (dos de Waldo, dos de Roberto Gil y uno del brasileño Chicao) mientras en la vuelta se perdió 2-1. En las semifinales el rival fue la AS Roma y en la ida un enrachado Valencia le endosó un 3-0 (Chicao, Héctor Núñez y Guillot). Después de un emocionante partido de ida y vuelta, Grosso convirtió a los ciento diecinueve minutos, y Alessandro Del Piero selló la victoria italiana en la última jugada del partido, tras un contraataque llevado por Fabio Cannavaro, Totti y Gilardino. Segundos antes de que el partido fuera prorrogado, el árbitro Luis Medina Cantalejo cobró una polémica falta en el área penal de Lucas Neill sobre Fabio Grosso en el minuto 93, lo que provocaría la anotación de Francesco Totti desde los 11 metros y así la victoria italiana. Se empezó con muchas dudas e irregularidad, alternando malos partidos con encuentros espectaculares como la victoria 4-3 en Mestalla frente al Real Madrid con goles de Gálvez, Fernando, Mijatović y Arroyo. Finalmente, en el último encuentro de grupo, Italia consiguió una victoria por 2-0 contra República Checa, con goles de Marco Materazzi y Filippo Inzaghi, lo que les dio el acceso a los octavos de final, en los que se enfrentaron a Australia.
En el equipo se mantuvieron varios de los jugadores que disputaron el pasado mundial, con algunas caras nuevas, como Giorgio Chiellini, Alessandro Gamberini (que reemplazó al lesionado Fabio Cannavaro), Marco Borriello, Antonio Cassano y Antonio Di Natale. Los Socceroos dominaron gran parte del partido (gracias también a la expulsión severa de Marco Materazzi), pero no pudieron anotar un gol gracias a la férrea defensa itálica y a la buena actuación del portero Gianluigi Buffon. Doce minutos después, Italia consiguió la igualada con un cabezazo de Materazzi a la salida de un córner servido por Pirlo. Ya en tiempo extra, Zidane fue expulsado tras pegar un cabezazo a Materazzi después de un intercambio verbal; los dos futbolistas fueron multados tiempo después por la FIFA. Italia venció por 2-0 a la selección anfitriona alemana, con dos goles en los dos últimos minutos del tiempo extra. Gigi solo recibió dos goles en todo el torneo y mantuvo su portería invicta durante 460 minutos. En el partido, los españoles lograron un mejor nivel de juego que los italianos, pero ni durante los noventa minutos ni en los treinta extra se logró vulnerar la portería de ninguno de los dos equipos, y el acceso a semifinales se definió por la tanda de penaltis.
Gianluca Zambrotta abrió el marcador a los seis minutos de juego, para que después Luca Toni anotase dos goles en la segunda mitad. Tras una primera temporada marcada por su irregularidad, Benzema marcó ocho goles en liga tras disputar 27 partidos. En cualquier caso, Italia no supo ser superior a sus rivales y cayó eliminada en la primera fase del Campeonato. Esa temporada de 1956/57 el equipo logró el subcampeonato de Liga, solo por detrás del Real Madrid de Di Stéfano, lo que le permitió participar por primera vez en la Copa de Europa, al haber ganado el equipo madridista la Copa de Europa el año anterior. Estas predicciones negativas finalmente se rebatieron y «la azzurra» consiguió su cuarta Copa Mundial. En la Eurocopa 2008 quedaron encuadrados en el Grupo C, el llamado «grupo de la muerte», debido a que en él estaba Francia (vigente subcampeona mundial) y Países Bajos (que en los dos últimos torneos había llegado a semifinales). Además, «La Azurra» venía con nuevo técnico, el entrenador Roberto Donadoni, quien reemplazó a Marcello Lippi, que dejó el cargo tras el mundial.
Posteriormente, el técnico de «La Azzurra», Marcello Lippi, dedicó el triunfo al ex-internacional italiano Gianluca Pessotto, que estaba en el hospital recuperándose de un intento de suicidio. Debido al excesivo número de extracomunitarios, Valdano debía descartar a un jugador en verano, camiseta betis y era Claudio López quien tenía todas las papeletas al no ajustarse al tipo de juego que deseaba el técnico argentino. El proceso de Manuel Lapuente como técnico nacional inicio con muchas dudas al caer con rivales en el papel inferiores y siendo goleado por los rivales fuertes en los partidos amistosos. Los tres triunfos marcan el mejor inicio del elenco verdiblanco en casi 60 años: Betis no partía con triunfos en las tres primeras fechas desde la temporada 1963/64, época donde peleó de cerca con Real Madrid y Barcelona por el título. Esa temporada Riazor será escenario de una brillante goleada por 5 a 1 al Valencia, con goles de Tino, Ponce en dos ocasiones, Guimeráns y Franco.